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Francisco Segovia |
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Francisco Segovia y Nikos Pratsinis |
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Francisco Segovia, Leonora Moreleón y Fernando Sandoval Flores |
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Francisco Segovia |
[...] En algún momento de comienzos del año de 1972, don Antonio Carrillo Flores, antiguo secretario de Relaciones Exteriores, de Hacienda, embajador de México en Washington y, en ese entonces, director del Fondo de Cultura Económica, se encontró con el presidente de El Colegio de México, don Víctor L. Urquidi, y le expuso su inquietud, basada en su propia experiencia internacionalista, de que México no tuviera un diccionario propio, que correspondiera a su historia y a su cultura, como sí lo tenía Estados Unidos de América en la tradición de los diccionarios de Noah Webster, ese patriota de la época de fundación de su país, continuada por la casa Merriam-Webster, de Massachussets. Don Antonio Carrillo Flores notaba, como muchos mexicanos, hispanoamericanos e incluso españoles, que los diccionarios de la Academia Española no correspondían ni al estado actual de la lengua, ni mucho menos a la manera en que había evolucionado en cada región hispanohablante, arraigándose en sus propias experiencias históricas. De ahí que le preguntara si El Colegio de México sería capaz de emprender la elaboración de un diccionario que, a la larga, se convirtiera en un “Webster mexicano”. [...]
Fuente:
Diccionario del español de México (DEM)
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